Durante el mes de mayo de 1996 se presentó a los medios de comunicación la revista cultural "La Jila", especializada en la música tradicional de Cantabria. Editada por la Asociación ADIC, estuvo dirigida por Alberto Martínez Beivide, miembro por aquella época del grupo de música tradicional Brañazorza e ilustrador. Publicación pionera de la música folk, estaba diseñada por Federico Santiago, y contaba con la colaboración del grupo de investigación La Juenti. En su primer número incluía un amplio reportaje de investigación sobre la dulzaina en Cantabria, realizado por Roberto Diego, además de profundizar en distintos aspectos sobre la identidad cántabra y dar información sobre discos y libros publicados, sin olvidar la promoción de los diferentes festivales de música folk que se organizaban en Cantabria y fuera de ella. La presentación al público de la revista "la Jila" fue durante la celebración de un festival folk que se desarrolló en el bar "La Pirula" de Santander, donde actuaron grupos como Ijana de Aras, Brañazorza, Llendemozó, y, además, contó con la presencia de los instrumentistas Alfonso García Oliva, Chema Puente y algunos miembros del grupo Luétiga. Con el objetivo de potenciar la cultura cántabra fuera de la región, y publicitar una serie de temas que no solían encontrar difusión en los medios de comunicación habituales, salió a un precio de 200 pesetas, e incluía 60 páginas en blanco y negro.
Artículo publicado en el periódico Alerta el 25 de mayo de 1996.
Artículo publicado en el periódico El Diario Montañés el 25 de mayo de 1996.
Portada del primer número de la revista de música tradicional "La Jila", publicado en 1996.